domingo, 30 de mayo de 2010

DESCANSANDO EN EL SEÑOR




Leamos lo que nos dice el Señor en MATEO 11:28

"VENID A MI TODOS LOS QUE ESTÉIS TRABAJADOS Y CARGADOS, Y YO OS HARÉ DESCANSAR"


Nosotros, antes de entregarle nuestra vida a Jesús, estábamos trabajados y cargados.

Trabajados, pues el diablo nos tenía atados. Y nosotros hacíamos lo que él quería. El diablo nos molestaba, nos hacía daño y trabajaba con todos sus demonios en nosotros, haciéndonos sentir mal.

Estábamos trabajados y cargados. Cargados porque llevábamos sobre nosotros todos los problemas y preocupaciones y no eramos felices. Teníamos enfermedades en el alma y en el cuerpo.

El Señor Jesús nos dice: "Venid a mi todos los que estén trabajados y cargados y yo os haré descansar"

Ahora somos libres. Jesús se llevó nuestras cargas en la cruz. Le hemos entregado nuestras vidas. Somos sus hijos y le pertenecemos a él. Por eso es tan importante darse cuenta, entender, que ya no tenemos cargas, Que todo lo que antes nos molestaba y nos hacía sufrir ya no está más. Nuestro Señor se ha llevado las cargas y debemos descansar en Él. Él nos cuida, nos protege y siempre trae una solución a nuestros problemas si esperamos en él y no nos preocupamos.

¿Cómo podemos descansar en el Señor?

Orando, conversando con Él , contándole nuestros problemas y nuestras tristezas. Él nos escucha siempre, Él está con nosotros y si nosotros le seguimos y tenemos confianza de que Él y solo Él puede ayudarnos, tendremos una gran victoria sobre nuestros problemas y preocupaciones. Debemos entender que ya no estamos solos y que Jesús vive en nosotros.

El Señor nos dice en JEREMÍAS 33:3 : "CLAMA (orar) A MI Y YO TE RESPONDERÉ, Y TE ENSEÑARÉ COSAS GRANDES Y OCULTAS QUE TÚ NO CONCES"

¡Clama a mí dice el Señor!

El Señor escucha nuestras oraciones. Nosotros no podemos resolver nada. No podemos hacer nada. Sólo orar y esperar en el Señor. Él hará todo lo demás.

En SAN JUAN 6:37 Jesús nos dice: "EL QUE A MI VIENE, NO LE ECHO FUERA"

Si nosotros buscamos su ayuda, Jesús nos recibe. Él no nos echa fuera. Nos protege y nos da su amor.

Toda La Biblia nos habla de las promesas de Dios. Y esas promesas son la verdad, y si creemos en esas promesas, Dios las cumple. Sólo debemos tener fe en Dios y descansar en Él.

Un hermoso Salmo que nos habla de las promesas de Dios, es el Salmo 23. En este Salmo vemos todo lo que Dios hace por nosotros y cómo podemos descansar en él.


ORACIÓN

Padre amado, en el nombre de Jesús te damos gracias por tu inmenso amor y misericordia. Te amamos con toda la fuerza de nuestro corazón. Sabemos que podemos descansar en Ti. No nos alcanzan los días y las horas para agradecerte todo lo que has hecho, lo que haces y lo que harás por nosotros.
Gracias Señor por llevarte nuestras cargas en la cruz y hacernos libres de toda atadura del enemigo.
Gracias por darnos tu paz y tu descanso que nos hace caminar felices tomados de tu mano.
Señor ayúdanos a contarle a los Sordos de ti y decirles que ellos podrán sentirse libres y felices si te conocen, Te lo pedimos en tu Nombre Jesús . Amén.

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